Después de muchos años el pasado 24 de mayo volví a mi instituto. En el mismo salón de actos donde hace ya más de 20 años me subí para pedir el apoyo a las huelgas estudiantiles y a los portuarios tuve el placer de charlar con un grupo de alumnos y alumnas de 1º ESO sobre mi libro El Misterio de las Afortunadas. Allí respondí a las dudas que estos me plantearon tanto sobre la trama que propongo en mi novela como sobre la vida de un escritor. Quiero darle las gracias a los alumnos por la valoración que hicieron de mi obra y a María del Mar, su profesora, por la labor que realiza para "enganchar" a los jovenes a la lectura.
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